sábado, 12 de septiembre de 2015

En defensa de Junts Pel Sí

La verdad que después de todo el periplo de movilizaciones y reuniones varias de los últimos años, en la que una parte clara de catalanes pedían la independencia de Catalunya, me parece una buena solución  crear una lista de sus partidarios, a falta de referéndum o consulta promovido por el gobierno de España. Excluida esta posibilidad, es la forma más limpia de contar los partidarios de esta opción, más cuando una de las críticas que hacemos muchos es por ejemplo que nunca CiU se había presentado con esta opción en su programa, sino todo lo contrario, y que algunos pensábamos que no eran tantos los independentistas.
Ahora parece que el debate está en si se tienen que contar el resultado en diputados o en votos. Si lo que se pretendía desde la lista de Junts Pel Sí era una forma de referéndum, claramente habría que contar votos, además de lo sesgada e injusta que es la ley electoral catalana para los ciudadanos de la provincia de Barcelona. No queda claro cómo se va a contar, cosa que a buen seguro dependerá de todos. Y aún nos espera el siguiente debate sobre el porcentaje de votos que indicaría es el principio de algo. No sé sabe ni se sabrá. 
Lo sorprendente es que organizaciones y líderes, principalmente de mis izquierdas, que han estado en la Assemblea Nacional Catalana y han convocado a sus militantes incluso en jornadas en que la ANC pedía la independencia, ahora no se hayan sumado a la lista. ¿A qué jugaban?  Los mismos peros que ponen ahora los podían haber puesto entonces, porque los nuevos estados y los viejos se hacen de forma transversal en todos los sentidos. Si era tan importante votar en este sentido, lo suyo hubiese sido apoyar a la lista de CDC, ERC, ANC y otros, y ahora tendríamos lo más parecido a un referéndum. 
Si era tan importante la cuestión, si se trataba de ver por dónde sopla el viento, quizás era lo mejor, pero que avisen por favor. Se hubiese agradecido un poco de seriedad y escuchar los debates de las propias bases en las asambleas y no lo que diga la tele, aunque sea pública. Porque ¿ahora qué? Ahora ¿qué harán si ellos van en una lista diferente de la que apoya la ANC? Porque la ANC va claramente con una lista y no es la nuestra. 
Si pensamos que todo esto tiene un importante componente de apoyo de, digamos, los convergentes para no hablar de su modelo económico y el resultado que ha tenido y tiene en Catalunya como en otros lugares de la UE, pues nos podíamos haber dedicado sólo a eso desde el principio. Pero ojo, que esto irá también para largo porque le va de fábula también al PP. 
Ahora falta que Junts Pel Sí también sea seria, y si el 27 no saca por lo menos mayoría de votos (si quieren con la CUP), lo deje estar y vuelva a convocar elecciones autonómicas. Pero me parece que pido mucho a todo el mundo y que la frivolidad campa a sus anchas.
 Le seguiré dando vueltas y preguntándome. ¿De verdad que CDC y lo que representa va a querer dejar de poder incidir directamente en la legislación de su principal mercado? Si son capaces de plantear la DUI ¿irán Junqueras y Mas a los edificios del estado a pedir las llaves y la última lectura de la luz y el agua? E igualmente los ciudadanos, ¿tendremos que ir pensando a quién les pagamos los impuestos o las multas o si nos paramos a dar explicaciones la guardia civil en la aduana de El Prat? El principal escollo no será el reconocimiento de los estados o de la UE, el principal problema es el reconocimiento de tus propios ciudadanos. 
Y a fin de cuentas, ¿va a haber alguien en las instituciones de España para hacer una lectura política de los resultados?